EL DISCIPULADO
LUC. 6:13
"Cuando se hizo de día, llamó a sus discípulos, y escogió doce de ellos, a
los que también dio el nombre de apóstoles."
INTRODUCCION
A través de todo el ministerio terrenal de nuestro Señor Jesucristo, se da mucha importancia, a la relación con los discípulos. Debido a que constantemente oímos la palabra discípulo es importante que entendamos y participemos en esta maravillosa tarea. En nuestra misión, existe un área específica denominada Discipulado, muchos pueden pensar que es simplemente un área de trabajo. Para comprender mejor que es ser discípulo o qué es el discipulado, señalaremos algunas definiciones, las cuales son verdades inconclusas:
A través de todo el ministerio terrenal de nuestro Señor Jesucristo, se da mucha importancia, a la relación con los discípulos. Debido a que constantemente oímos la palabra discípulo es importante que entendamos y participemos en esta maravillosa tarea. En nuestra misión, existe un área específica denominada Discipulado, muchos pueden pensar que es simplemente un área de trabajo. Para comprender mejor que es ser discípulo o qué es el discipulado, señalaremos algunas definiciones, las cuales son verdades inconclusas:
·
El discípulado es un área de trabajo dentro de la iglesia
·
Una reunión donde se aprenden temas doctrinales
·
Una reunión de amistad
Existe diferentes opiniones acerca de
este tema, pero Qué significa para nosotros el discipulado a la luz de la
Palabra de Dios?.
DESARROLLO
I. La Institución del Discipulado
MAT.28:19 "...Id y haced
discípulos..."
Esta es una orden dictada por Jesús
con el objeto de hacer discípulos a quienes han creído en El, siendo preparados
en su vida espiritual para agradar a Dios. Esta ordenanza es urgente llevarla a
cabo y desarrollarla en una forma constante. Concluimos entonces, que el
Discipulado es instituido por el Señor (no es una invención humana) y que todo
cristiano debe sentir la necesidad de participar en el, aprendiendo y
enseñando.
II. ¿Qué es un
Discípulo?
La palabra griega que se traduce
discípulo es "Mathethe" que literalmente significa "un
aprendiz". Es alguien que se ha comprometido a tomar la forma de
la persona que le está enseñando. En nuestro caso, el anhelo debe ser adquirir
la forma de Jesucristo, aprovechando todo lo que el nos enseña para nuestro
beneficio. Así podemos comprender que el ser discípulos, va más allá de
aprender un tema o tener un privilegio. El ser discípulos de Cristo significa
estar comprometidos, aprendiendo durante nuestra existencia en la tierra, pero
sobre todo, poniendo por obra sus enseñanzas (Mt. 28:20 - Jn. 8:31). Podemos
entonces es definir el discipulado como una obra de Dios, en la cual somos
constantemente enseñados por nuestro maestro (Jesucristo) a través del Espíritu
Santo, habiéndonos comprometido a vivir lo que estamos aprendiendo.
Con este propósito el Señor se vale
de muchas formas, tales como la Palabra escrita, el Espíritu Santo, los
ministerios, las circunstancias de la vida diaria, etc.
III. Características de un Verdadero Discípulo
Alguien que ha creído en Cristo no
necesariamente es un discípulo, un verdadero discípulo del Señor, debe reunir
ciertas características que son:
·
Debe tener un llamado a ser Discípulo (Luc. 6:13).
·
Se ha comprometido a obedecer a pesar de sus propios deseos
(Mat. 8:19-22).
·
Permanecer en su Palabra (Jn. 8:31).
·
Lleva mucho fruto (Jn. 15:5).
·
Aunque tiene otras obligaciones o necesidades, su prioridad
es agradar a su Maestro (Lc. 9:57-62).
IV. Niveles del Discipulado
A. De Multitudes Cuando el Señor enseñaba a las
multitudes (Lc. 5:1-11) ejercía una tarea muy amplia, puede pareder que de esta
manera no se puede discipular, sin embargo, El aprovechó todas las ocasiones
para enseñar, sanar, obrar milagros, etc.
B. De Setenta Cuando el Señor comisiona a los setenta se vé un nivel
más de discipulado y en donde los envía de dos en dos.
C. De los Doce En el pasaje citado anteriormente
(Lc. 5), advertimos que sus discípulos, se acercaron a El, por el contexto,
sabemos que El los llamó de entre la multitud para que le siguieran de cerca,
llamándoles posteriormente apóstoles, es otro nivel de discipulado donde la
relación es más estrecha.
D. De los Tres El nivel de discipulado que nos llama
la atención es el que tuvo con tres de sus discípulos: Pedro, Jacobo y Juan,
sólo ellos presenciaron los momentos más cruciales en el ministerio terrenal
del Señor: la Transfiguración y la Agonía del Monte de los Olivos.
E. De Uno Finalmente para mostrarnos que se puede discipular en
forma individual surge así el último nivel, el que sostuvo con Juan "El
que se recostaba en su pecho". Recuerde que es precisamente a quienes los
demás discípulos piden que pregunte al Señor en la Cena de la Pascua quién iba
a entregarle, ellos mismos reconocían su relación más estrecha con Jesús.
V. La Visión Discipuladora en Nuestra Congregación
El área de Discipulado obedece al
mandato del Señor funcionando con la misión de trasmitirla Doctrina apostólica,
enseñándole a los discípulos a guardar la palabra. Con este propósito se hacen
reuniones en hogares de grupos pequeños a fin de aprovechar al máximo el
estudio de la palabra, ya que no es un culto o servicio evangelístico;
conviviendo con los hermanos miembros de la misión en el partimiento del pan y
en la oración. Sentir la necesidad de ser discipulado dará como resultado un
crecimiento espiritual, siendo preparados por parte del Señor para ejercer la
obra del Ministerio.
El estudiar la palabra en los
discipulados es como el óleo (revelación)
que desciende sobre la cabeza (apóstol),
hasta llegar al borde de sus vestiduras (ministros),
cubriendo de esta manera todo el Cuerpo (Sal. 133).
VI. La Función del Discipulador
El discipulador debe cumplir las
funciones de alimentar y cuidar a los discípulos, convirtiéndose en los del
pastor. Esta visión es encomendada hombres que deben ser idóneos (2da. Tim.
2:2) y fieles: a las coberturas que Dios a dejado (Ef. 3:11) y a la doctrina,
sin contender con ella (2da. Tim. 2:14).
A. Alimentar a los Discípulos
El discipulador debe cumplir con lo
que dice el apóstol Pablo a Timoteo, "Procura con diligencia presentarte a
Dios aprobado, como obrero que no tiene de que avergonzarse, que maneja con
precisión la palabra de verdad. (2da. Tim. 2:15).
Aprobado ante Dios esto significa que
tiene que estar en constante entrega de su voluntad, permitiendo que el
Espíritu Santo haga la obra de regeneración en su vida. Al decir que no tiene que
avergonzarse se refiere a cuando está dando buen testimonio delante de los
demás; siendo ejemplo dentro de sus ovejas.
El manejar con precisión la palabra de verdad es su preparación para
poder llevar buen alimento a sus discípulos.
B. Cuidar a los Discípulos
No es nada más llegar al discípulado
a impartir una enseñanza, es preocuparse de los discípulos. La figura la
encontramos en David. El se preocupaba de cuidar a sus ovejas del ataque de las
fieras: "Pero David respondió a Saúl: Tu siervo apacentaba las ovejas de
su padre, y cuando un león o un oso venía y se llevaba a un cordero del rebaño,
yo salía tras el, lo atacaba, y lo rescataba de su boca; y cuando se levantaba
contra mí, lo tomaba por la quijada, lo hería y lo mataba (1a. Sam. 17:34-35).
El discipulador debe interceder por sus discípulos y pelear contra el que anda
como león rugiente.
CONCLUSIONES
- Ser discípulo es estar comprometido
con el Señor, tomando parte activa guardando su palabra.
- El verdadero discípulo reconoce la
autoridad de las coberturas y se somete con humildad y obediencia.
- Ser discípulo implica negarse a uno
mismo, tomar su cruz y seguirle (Mat. 16:24).
- Ser discípulo es estar comprometido
a tomar la forma de la persona que no está enseñando (Cristo).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario