jueves, 19 de mayo de 2016

CIELOS



CIELOS

ANTIGUO TESTAMENTO
shamayim
(µyIm'v; , H8064), «cielos; cielo, bóveda celeste». Este vocablo semítico muy generalizado se encuentra en lenguajes tales como ugarítico, acádico, arameo y arábigo.

1.      shamayim es la palabra hebrea corriente para la «bóveda celeste» y el «ámbito celeste» donde vuelan las aves. Dios prohíbe a Israel hacer «semejanza de cualquier figura… ni en forma de cualquier animal que esté en la tierra, ni en forma de cualquier ave alada que vuele en los cielos» (Dt.4:17 RVA). Cuando los cabellos de Absalón se enredaron en las ramas de un árbol, quedó suspendido entre «cielo» y tierra (2S.18:9).  Este ámbito, por encima de la tierra pero debajo de los cuerpos celestes, es a menudo lugar de visiones: «David alzó sus ojos y vio al ángel de Jehová que estaba entre el cielo y la tierra, con una espada desenvainada en su mano, extendida sobre Jerusalén» (1Cr_21:16).

2.      el término representa un ámbito aún más alejado de la superficie terrestre.  De aquí es de donde provienen fenómenos como la escarcha (Job 38:29), la nieve (Is.55:10), el fuego (Gn.19:24), el polvo (Dt.28:24), el granizo (Jos.10:11) y la lluvia: «Fueron cerradas las fuentes del océano y las ventanas de los cielos, y se detuvo la lluvia de los cielos» (Gen_8:2). Este es el depósito de Dios; Él es el que administra los recursos y es Señor de este ámbito (Deu_28:12). Este significado de shamayim aparece en Gn.1:7-8 «E hizo Dios la bóveda, y separó las aguas que están debajo de la bóveda, de las aguas que están sobre la bóveda. Y fue así. Dios llamó a la bóveda Cielos» (RVA).

3.      shamayim también representa el ámbito donde el sol, la luna y las estrellas se encuentran: «Entonces dijo Dios: Haya lumbreras en la bóveda del cielo para distinguir el día de la noche» (Gen_1:14). Estas imágenes se repiten a menudo en la narración de la creación y en los pasajes poéticos. Es así que los «cielos» se extienden como una cortina (Sal_104:2) o se pliegan como un rollo de pergamino (Isa_34:4 rva).

4.      la frase «cielo y tierra» puede referirse a toda la creación, como en el caso de Gen_1:1 «En el principio creó Dios los cielos y la tierra».

5.      «el cielo» es la morada de Dios: «El que habita en los cielos se reirá, el Señor se burlará de ellos» (Sal_2:4; cf. Dt. 4.39). Nótelo de nuevo en Deu_26:15 «Mira desde tu santa morada, desde el cielo, y bendice a tu pueblo Israel». Otra expresión que representa la morada de Dios es «los cielos de los cielos», lo cual indica un absoluto, es decir, la morada de Dios es un ámbito tan incomparable que no se puede identificar con la creación física: «He aquí, de Jehová tu Dios son los cielos, y los cielos de los cielos, la tierra y todo lo que en ella hay» (Deu_10:14).


NUEVO TESTAMENTO
A. NOMBRES
1. ouranos (oujranov", 3772), probablemente relacionado con ornumi, levantar, alzar. Se usa en el NT:
(a) de los cielos aéreos (p.ej., Mat_6:26; 8.20; Act_10:12; 11.6; Jam_5:18);
(b) del cielo sideral (p.ej., Mat_24:29, 35; Mc 13.25, 31; Heb_11:12; Rev_6:14; 20.11); tanto (a) como (b) fueron creados por el Hijo de Dios (Heb_1:10), así como también por Dios el Padre (Rev_10:6);
(c) son la morada eterna de Dios (Mat_5:16; 12.50; Rev_3:12; 11.13; 16.11; 20.9). De allí descendió el Hijo de Dios para encarnarse (Joh_3:13,31; 6.38, 42). En su ascensión, Cristo «traspasó los cielos» (Heb_4:14, RVR; RV: «penetró los cielos»); «subió por encima de todos los cielos» (Eph_4:10), y fue «hecho más sublime que los cielos» (Heb_8:1); está «a la diestra de Dios», habiendo subido al cielo (1Pe_3:22). Desde su ascensión, el cielo es la esfera de su presente vida y actividad (p.ej., Rom_8:34; Heb_9:24). De allí descendió el Espíritu Santo en Pentecostés (1Pe_1:12). Es la morada de los ángeles (Mat_18:10; 22.30; cf. Rev_3:5). Allí fue Pablo arrebatado, no sabiendo si era en el cuerpo o fuera del cuerpo (2Co_12:2). Ha de ser la morada eterna de los santos en la gloria de la resurrección (2Co_5:1). De allí descenderá Cristo al aire para recibir a sus santos en el arrebatamiento (1Th_4:16; Phi_3:20, 21), y vendrá posteriormente con sus santos y con sus santos ángeles en su Segunda Venida (Mat_24:30; 2Th_1:7). En la presente vida, el cielo es la región de la ciudadanía espiritual de los creyentes (Phi_3:20). Los cielos actuales, con la tierra, han de «pasar» (2Pe_3:10), «encendiéndose» (v. 12; véase v. 7; Rev_20:11), y se crearán nuevos cielos y una nueva tierra (2Pe_3:13; Rev_21:1, con Isa_65:17, p.ej.). En Luk_15:18, 21, se usa cielo para denotar a Dios; en Heb_9:23, se traduce «celestiales» (RV, RVR, RVR77, VM, lit., «de los cielos»).

2. mesouranema (mesouravnhma, 3321) denota el cielo medio, o el medio de los cielos (mesos, medio, y Nº 1) (Rev_8:13; 14.6; 19.17). Véase MEDIO.

B. Adjetivos 1.
ouranios (oujravnio", 3770), significando celestial, del cielo. Se corresponde con A, Nº 1, y se usa:
(a) como apelación de Dios el Padre (Mat_6:14, 26, 32: «vuestro Padre celestial»; 15.13: «mi Padre celestial»);
(b) como descripción de los santos ángeles (Luk_2:13 «huestes celestiales»);
(c) de la visión contemplada por Pablo (Act_26:19 «visión celestial»).

3. epouranios (ejpouravnio", 2032), celeste, celestial, lo que pertenece, o está, en el cielo (epi, en el sentido de «pertenecer a»), no aquí, sino «arriba», tiene significados que se corresponden a algunos de los significados de ouranos, A, Nº 1. Se usa:
a)      de Dios el Padre (Mat_18:35);
b)      del lugar donde Cristo fue al Padre, «sentándole a su diestra en los lugares celestiales», esto es, en una posición de autoridad divina (Eph_1:20); y de la presente posición de los creyentes en relación con Cristo (Eph_2:6); donde poseen «toda bendición espiritual» (Eph_1:3);
c)      de Cristo como el «segundo hombre», y de todos los que están relacionados con Él espiritualmente (1Co_15:48);
d)     de aquellos cuya esfera de actividad o de existencia es arriba, o en contraste de la de la tierra, de «los principados y potestades» (Eph_3:10); de las «huestes espirituales de maldad» (6.12: «en las regiones celestes»);
e)      del Espíritu Santo (Heb_6:4);
f)       de cosas «celestiales», como temas de las enseñanzas de Cristo (Joh_3:12), y de las consistentes del santuario espiritual y celestial y «verdadero tabernáculo», y de todo lo que le pertenece en relación con Cristo y su sacrificio como anticipo del tabernáculo terrenal y sus sacrificios bajo la Ley (Heb_8:5; 9.23);
g)      del «llamamiento» o vocación de los creyentes (Heb_3:1);
h)      del cielo como morada de los santos, «una patria … mejor» que la de la tierra (Heb_11:6), y de la Jerusalén espiritual (12.22);
i)        del reino de Cristo en su manifestación futura (2Ti_4:18);
j)        de todos los seres y cosas, animadas e inanimadas, que están «sobre la tierra» (Phi_2:10); (k) de los cuerpos de resurrección y glorificados de los creyentes (1Co_15:49); (l) de los cuerpos u orbes celestiales (1Co_15:40 «celestiales», dos veces). Como «celeste» se traduce solo en Eph_6:12 (RV: «en los aires»).

Véase . Nota: En relación con (a), la palabra «celestial» usada de Dios el Padre en Luk_11:13 representa a la frase exouranou, «del cielo». C. Adverbio ouranothen (oujranovqen, 3771), formado por A,  Nº1, y denotando «del cielo». Se usa:
(a)    del cielo atmosférico (Act_14 17);
(b)   del cielo, como la esfera increada de la morada de Dios (26:13).


REFERENCIAS BIBLICIAS

·         Separación de aguas, Gen_1:6
·         Abierta expansión de los cielos, Gen_1:20
·         Cabalga en los cielos, Deu_33:26
·         Nubes cargadas, 2Sa_22:12 Psa_18:11
·         Extiende los cielos, Job_37:18
·         Tormenta eléctrica, Psa_77:17
·         Lluvias de justicia, Isa_45:8
·         Juicio hasta el cielo, Jer_51:9
·         Pronóstico del clima, Mat_16:2-3 Luk_12:54-56
·         Estrellas del cielo, Heb_11:12

Bibliografía

DICCIONARIOS VINE ANTIGUO Y NUEVO TESTAMENTO, CONCORDANCIA BIBLICA

666 La Marca de la Bestia

666 La Marca de la Bestia presentado por Carlos H. Clever La advertencia más solemne escrita en la Biblia hoy en día se encuentra en el ...