FORTALECIENDO AL HOMBRE INTERIOR

FORTALECIENDO AL HOMBRE INTERIOR

ROMANOS 4:18-20

           

5 Febrero 1995              

 "Abraham creyó contra toda esperanza, de modo que vino a ser padre de muchas naciones, de acuerdo con lo que se le había sido dicho: Así será tu descendencia. Sin debilitarse en la fe, él tuvo muy en cuenta su cuerpo ya muerto (pues tenía casi cien años) y la matriz muerta de Sara. Pero no dudó de la promesa de Dios por falta de fe. Al contrario, fue fortalecido en su fe, dando gloria a Dios..."  Ro. 4: 18-20 (RVA)

El espíritu de toda doctrina debe conducir hacia la práctica; en la cual debemos ser cuidadosos de no ser demasiado prácticos a tal punto de perder la fe que debe habitar en nuestros corazones.  Esta práctica debe ser espiritual, para que no seamos conducidos a una plenitud de vida terrenal solamente, sino llevarnos por el camino en el que encontraremos la perfección de nuestra alma y nuestro ser interior y que logremos lo que Dios quiere para nosotros, es decir, conducirnos a que cuando el Señor aparezca, seamos transformados de tal manera que seamos llevados con El y permanecer siempre así con El.

Es importante saber que Abraham fue fortalecido pero esto es solo un paso de la plenitud que Dios tiene para nosotros: "Y cuando hayáis padecido por un poco de tiempo, el Dios de toda gracia, quien os ha llamado a su eterna gloria en Cristo Jesús, El mismo os restaurará, os afirmará, os fortalecerá y os establecerá".  1P. 5:10 (RVA).

Establecernos es el paso final del proceso, pero para llegar a ser establecidos tenemos que ser restaurados, afirmados (o confirmados) y fortalecidos.

RESTAURACION

Hay muchas cosas en las que tenemos que ser restaurados: nuestra alma, mente, forma de pensar, etc. y ser llevados a la medida que teníamos al principio, pero esa medida no la recordamos, ya que tenemos una pre-existencia y cuando venimos a la tierra tuvimos que despojarnos de algo, pues somos similares al Señor Jesucristo y El se despojó de su gloria para venir a la tierra. Nosotros al venir a la tierra, nos  ensuciamos y ahora estamos siendo restaurados por Dios para llegar a la imagen del Señor. Mal. 4:5-6 dice que el espíritu de Elías vendrá y restaurará,  por lo que aunque nos encontremos en una situación muy difícil debemos tener esperanza porque llegará el tiempo de nuestra restauración que estará acompañada de la restauración del tabernáculo de David (Hch. 15-16), lo cual no se refiere sólo a la alabanza, sino también al amor, porque David es figura del amor, en la Biblia se refiere a él como el amado, y es necesario restaurar el amor. En Ap. 2:4-5 dice que hay personas que ya no sienten amor como lo sintieron al principio.  Abraham fue fortalecido, pero para esto antes fue restaurado y confirmado.  La restauración es entonces el inicio de un proceso que empieza con la restauracios del amor a Dios.Amor que no se manifiesta sólo con servir, ofrendar, y asistir a la iglesia.

AFIRMAR O CONFIRMAR?

Cómo se confirma y a quién se confirma?  Lógicamente se confirma a alguien a quien ya le ha sido dado algún lugar. Dios confirma, entre otros, por medio de dones (Ro. 1:11) por lo que debemos buscar los dones de Dios (1Co.12:31)

ESTABLECER;

Este es el paso final, significa que algo o alguien se puso en algún lugar para ya no ser movido.  Son cuatro pasos porque significa la totalidad de las cosas que han de suceder en la tierra.  El paso intermedio es fortalecer.

FORTALECER;

1.          Las Manos: Neh. 6:8.  En la obra de Dios encontraremos enemidos que surgirán repentinamente, y al sentir el odio de los enemigos, nuestras manos se debilitan para la obra, por lo que las debemos levantar y pedir al Señor que nos fortalezca, no solo para la obra sino para todo.  El enemigo trata de debilitarnos en la obra que estamos haciendo.El Señor Jesucristo tenía sobre sí un "espíritu de fortaleza" (Is. 11-2), porque el Padre sabía que tendría momentos de debilidad humana (Mat. 26:36).

2.          Las Rodillas: Job 4:3. Las rodillas nos hablan de la oración, es decir que necesitamos ser fortalecidos para orar,  algunas veces es tan difícil la situación que aún el deseo de orar se va, por eso si alguien es débil en la oración debe buscar ayuda.  Es impresionante ver una Iglesia vigorosa en oración, las personas llegan a los servicios mas dispuestas que cuando han pasado su tiempo en otro tipo de actividades.  En nuestro país no es muy difícil nuestra situación, en cuanto a ser perseguidos por ser cristianos, sin embargo hay lugares en los que los siervos para poder hacer la obra, son sostenidos únicamente a base de la oración. Todos deberíamos, sin caer en legalismos, tener una disciplina de oración.

3.          Las Puertas de nuestra Ciudad:  Sal. 147:12-13. El fortalecer las puertas de nuestra ciudad se refiere a muchas cosas, como nuestro país, hemos visto como Guatemala ha sido librada de grandes catástrofes y situaciones de emergencia que quizas no podríamos sobrellevar. Nos habla de nuestra Iglesia,  hemos visto como el Señor la ha guardado incluso los locales de las mismas.  También vemos que el Señor guarda nuestras casas y nuestras cosas materiales (Job 1:1o) y nuestro corazón, pues pertenece a El y sólo El tiene la "llave" para ingresar.

4.          Los Huesos: Is. 58:10.  Algunas enfermedades de los huesos  parecen estar relacionadas con la amargura de espíritu, en Ecl. 10:11 dice que el Espíritu habita en los huesos. En los pasajes de Juan 5:14 y Mat 9:1-8 podemos ver que hay enfermedades de causa espiritual, aunque NO TODAS. Hay enfermedades que incluso nos describen problemas del alma, por ejemplo algunas enfermedades de la piel pueden estar relacionadas con rebelión a una autoridad o cobertura.  Si el Señor fortalece nuestros huesos estaremos siempre victoriosos.                     

5.          El Animo: Hch. 14:21-22.  En este pasaje, el apóstol fortalece a los discípulos recordándolas que las pruebas son necesarias. Nosotros fortalecemos muchas veces de acuerdo a nuestra opinión,  Dios es quien en verdad nos fortalece dándonos, cuando lo necesitamos, el Espíritu de Fortaleza.  

Para concluir diremos que también podemos ser fortalecidos por medio de la Cena del Señor, pero es necesario examinarnos, ya que la Santa Cena puede fortalecernos o bien debilitarnos (1a. Co. 11:27-34).  Abraham fue fortalecido en la fe, y nosotros debemos también ser fortalecidos en la fe.