EL LLAMAMIENTO DE DANIEL
(9 de agosto de
1992)
I.
TEXTO BIBLICO
"Te
ruego que pongas a prueba a tus siervos por diez días, y que nos den legumbres
para comer y agua para beber. Que se compare después nuestra apariencia en tu
presencia con la apariencia de los jóvenes que comen los manjares del rey, y
haz con tus siervos según lo que veas. Los escuchó, pues, en esto y los puso a
prueba por diez días." Daniel 1:12
- 14 (La Biblia de las Américas)
II.
INTRODUCCION
Los libros de Daniel y Apocalipsis
presentan una intensa correlación de
verdades, tanto de eventos futuros como de realidades prácticas para el
equilibrio del cristiano. Para entender
este amplio conjunto de verdades es necesaria la ayuda de Dios porque, a través
de los tiempos, la capacidad humana se ha demostrado más que incapaz para
semejante empresa.
Talvez una razón por la que estos dos
libros encierran verdades tan semejantes se deba a la semejanza de la vida de
sus respectivos autores. Tanto el Profeta Daniel como el Apostol Juan eran
formados en las siguientes características:
a) Amor:
Daniel: "Se propuso Daniel en su
corazón no contaminarse con los manjares del rey ni con el vino que él bebía, y
pidió al jefe de los oficiales que le permitiera no contaminarse." (Daniel
1:8)
Juan: "Uno de los discipulos, el
que Jesús amaba, estaba la la mesa reclinado en el pecho de Jesús." (Juan
13:25)
b) Madurez espiritual:
Daniel: "A estos cuatro jóvenes
Dios les dio conocimiento e inteligencia en toda clase de literatura y
sabiduría, además Daniel entendía toda clase de visiones y sueños."
(Daniel 1:17) Juan: "El anciano a
la señora escogida y a sus hijos, a quienes amo en verdad, y no sólo yo, sino
todos los que conocen la verdad." (2 Juan 1:1)
c) Prueba y tribulación:
Daniel: "Te ruego que pongas a
prueba a tus siervos por diez días, y que nos den legumbres para comer y agua
para beber." (Daniel 1:12) Juan:
"Yo, Juan, vuestro hermano y compañero en la tribulación, en el reino y en
la perseverancia en Jesús, me encontraba en la isla llamada Patmos, a causa de
la palabra de Dios y del testimonio de Jesús." (Apocalipsis 1:9)
Este último aspecto es particularmente
interesante porque la naturaleza de estas pruebas es el amor al evangelio y no
las actitudes almáticas. Estas pruebas son necesarias a la vida del cristiano,
su objetivo es pesar las obras realizadas y destruir las areas desagradables
ante Dios.
ATENCION:
Dios no permite pruebas mayores de las que se puedan sobrellevar:
"Porque has
guardado la palabra de mi perseverancia, yo también te guardaré de la hora de
la prueba, esa hora que está por venir sobre todo el mundo para probar a los
que habitan sobre la tierra." (Apocalipsis 3:10) El libro de Daniel, el Apocalipsis del
Antiguo Testamento, relata la vida de este varón en medio de pruebas. Tanto el
Profeta como el Apostol tuvieron pruebas. Para entender estos dos libros es
necesario seguir el ejemplo de estos varones, el ejemplo de una vida en medio
de la prueba:
"Sabiendo que la prueba de vuestra
fe produce paciencia, y que la paciencia ha de tener su perfecto resultado,
para que seáis perfectos y completos, sin que os falte nada." (Santiago
1:3)
III.
DESARROLLO
Como dicho en párrafos anteriores, el
libro de Daniel relata la vida de este varón en medio de pruebas, de hecho, la
primera prueba que este hombre enfrenta es su llamamiento: ir a Babilonia en situación
de cautiverio; apartado de su pueblo, de su tribu, de su familia, de su casa,
de sus padres, etc. Siendo todavía un
joven de la tribu de Judá, Daniel fue llamado al servicio en el palacio del
rey.
Todos los servidores cercanos del rey
debían ser transformados en eunucos, o sea, debían ser operados de tal manera
que sus funciones fisiológicas sexuales no pudieran ser nunca más
desarrolladas.
ATENCION:
es muy probable que Daniel hubiera sido transformado en eunuco.
En esta primera prueba, en este
llamamiento, Daniel fue privado de su ascendencia (padres) y de su descendencia
(hijos). El llamamiento de Daniel lo dejó solitario, en una sociedad ajena a la
suya y aunque los servidores del rey hicieran eunuco a este varón, él mantuvo
su condición de hombre delante de Dios.
ATENCION:
el concepto de la palabra hombre está en función a la capacidad con que una
persona se deja gobernar por Dios y consecuente responsabilidad con que
enfrenta sus actos.
Esta condición de hombre se ve reflejada
desde las primeras que la Biblia registra de este varón: "Te ruego que
pongas a prueba a tus siervos por diez días, y que nos den legumbres para comer
y agua para beber." (Daniel 1:12)
De esta sentencia se pueden desprender aspectos sumamente importantes
para la vida del cristiano:
a) La definición:
Esta es una definición hacia la
consagración. Sólamente esta firme proposición en el corazón permitirá que el
alma y el cuerpo no se contaminen con las inmundicias de Egipto y
Babilonia. Para entender la profecía escatológica
es necesario la definición en la
consagración y estar dispuesto a vivir y, en algunos casos a sufrir, lo que a
cada uno le corresponde.
ATENCION:
La consagración dará origen a una Iglesia fuerte.
b) El origen de la contaminación:
En Mateo 15:11 y en Marcos 7:15,
Jesucristo dice: "no es lo que entra en la boca lo que contamina al
hombre; sino lo que sale de la boca, eso es lo que contamina al
hombre." Daniel entendió que la
comida como tal no lo contaminaría. La actitud en la definición de Daniel debe
ser estudiada en relación a las consecuencias espirituales que tenían estos
alimentos ya que, según la costumbre del pueblo babilónico, la comida del rey
era parte del ritual de dedicación a sus ídolos. Daniel comprendió lo que
verdaderamente contamina: ser partícipe del culto a ídolos.
La falta de consagración produce
desconocimiento y muchos cristianos se hacen ciegamente partícipes del culto a
los ídolos. Siguen a personas que presentan poderosas señales de "milagros
y maravillas" pero cuya doctrina es falsa. Al participar de esta mesa
digieren alimento contaminado y tiene comunión con las tinieblas. A este respecto, la Biblia advierte:
"Porque se levantarán falsos Cristos y falsos profetas, y mostrarán
grandes señales y prodigios, para así engañar, de ser posible, aún a los
escogidos." (Mateo 24:24) Y también exhorta: "Antes bien, examinadlo
todo cuidadosamente, retened lo bueno." (1a Tesalonicenses 5:21)
c) La plenitud de la prueba, su fruto y
recompensa:
Daniel pidió un período de prueba de
diez dias: "Te ruego que pongas a prueba a tus siervos por diez días
..."(Daniel 1:12). De hecho, la prueba duro diez dias: "Los escuchó,
pues, en esto y los puso a prueba por diez días." (Daniel 1:14) A la luz del conocimiento bíblico, el número
diez (10) significa la totalidad de los eventos y, aplicado a una prueba,
representa la totalidad del tiempo de la prueba. El período de duración de una
prueba es completo:
"No temas lo que estás por sufrir.
He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel para que seáis
probados, y tendréis tribulación por diez días. Sé fiel hasta la muerte, y yo
te daré la corona de vida." (Apocalipsis 2:10)
Al completar victoriosamente la prueba,
el cristiano necesariamente es una persona diferente: "Al cabo de diez
días su aspecto parecía mejor y estaban más rollizos que todos los jóvenes que
habían estado comiendo los manjares del rey." (Daniel 1:15). A este grupo
de cristianos victoriosos, les sucederá lo que a Rebeca, figura de la Iglesia,
cuando Abraham, figura del Padre, envió a Eliezer, figura del Espíritu Santo
para que tomara una mujer entre sus parientes para ser esposa de su hijo Isaac,
figura del Señor Jesucristo.
A estos cristianos Dios, a través del
Espíritu Santo, les mencionará las
cosas, los tiempos y las sazones de los tiempos: "Pero de aquel día y hora
nadie sabe, ni siquiera los ángeles del cielo, ni el Hijo, sino solo el
Padre." (Mateo 24:36 y Marcos 13:32)
ATENCION:
es importante distinguir que además del novio (Señor Jesucristo) y la novia (Iglesia
victoriosa), están los amigos del novio (por ejemplo Juan El Bautista) y los
amigos de la novia (por ejemplo El Apostol Pablo y los Ministros).
d) Tipos de ayuno:
Cuando un cristiano determina en su
corazón buscar a Dios para rendirle áreas que impidan el fluir de su Santo
Espíritu en su vida, puede efectuar esta búsqueda a través de la privación en
la realización de determinadas actividades o actitudes. Esto es el ayuno. Existen ayunos que son sobrenaturales, como
los realizados por Moisés (Exodo 34:28) y el Señor Jesús (Mateo 4:2 Marcos 1:13
y Lucas 4:2); y ayunos que no son
sobrenaturales, como el de tipo sexual (1a Corintios 7:5), el abstenerse de
comer cosas deliciosas (Daniel 1:12), etc.
Dios inició su obra en las vidas de
Daniel y de sus tres amigos en medio de un ayuno de manjares. Comenzó a
preparalos para los eventos sobrenaturales que les vendrían: "A estos
cuatro jóvenes Dios les dio conocimiento e inteligencia en toda clase de
literatura y sabiduría; además Daniel entendía toda clase de visiones y
sueños." (Daniel 1:17)
Daniel era el líder de este grupo y como
consecuencia él era el promotor de tal actitud (Daniel 1:8 y 12). En medio de
este ayuno, Dios les dió a los cuatro jóvenes conocimiento y literatura pero
sólamente a Daniel se le dió el entender visiones y sueños. Al líder Daniel se
le dió más que a los otros tres jóvenes. Esto es lo que escribe el Apostol
Judas al referirse a las Potestades Angélicas o Glorias Celestiales que cubren
a los ministros.
La Potestad Angélica que cubría a este
varón (Ezequiel 28:3) era la encargada por Dios de enseñar a Daniel las
visiones y los sueños y de descubrirle sus misterios.
e) Tipos de sueños:
De la misma manera que existen
diferentes ayunos, los sueños pueden clasificarse en relación a su origen. En
este sentido, existen sueños del Espíritu y sueños del alma. Los sueños espirutales son el resultado de la
voz de Dios dando dirección a un accionar. Esta categoría de sueños están
tipificados en la vida y ministerio de José. La Biblia describe seis sueños en
tres grupos diferentes:
El primer grupo de dos sueños fue en la
casa de su Padre. Siendo un joven de diecisiete años, José tuvo dos sueños que
hablaban de él. Estos sueños provocaron la salida de José de la casa de Jacob:
"Cuando ellos lo vieron de lejos, y
antes que se les acercara, tramaron contra él para matarlo. Y se dijeron unos a
otros: Aquí viene el soñador. Ahora pues, venid, matémoslo y arrojemoslo a uno
de los pozos; y diremos: Una fiera lo devoró. Entonces veremos en qué quedan
sus sueños." (Génesis 37:18-20)
El segundo grupo de dos sueños lo tuvo
el copero y el panadero respectivamente, compañeros de celda de José (Génesis
40). José tenía veintiocho años cuando esto sucedió.
ATENCION:
a la luz del conocimiento bíblico, catorce es número de buen testimonio. Esto
podría interpretarse como: "de cierto de cierto te digo que ya estás
preparado para salir de la carcel".
El tercer y último grupo de sueños lo
tuvo el faraón. José descubrió e interpretó los sueños de este personaje. Con
este grupo de sueños José obtuvo su libertad y fue enaltecido al punto de ser
el segundo hombre del imperio Egipcio.
El libro de Job indica que durante la noche suceden cosas misteriosas y
a José, el padre adoptivo de Jesús, Dios le habló en la noche cuando un angel
traspasó su sueño y le indicó lo que debería realizar.(Mateo 1:20)
ATENCION:
lo que le sucedió a José es semejante a una visión nocturna.
La persona debe atender a la voz de Dios,
de lo contrario le vendrá intranquilidad y su espíritu se turbará a la manera
de Nabucodonosor: "En el año segundo del reinado de Nabucodonosor, éste
tuvo sueños, y se turbó su espíritu y no podía dormir." (Daniel 2:1)
Los sueños del alma son el resultado de
la propia conciencia humana. A este respecto es importante saber que los medios
que el cuerpo utiliza para expulsar todo aquello que no representa nutrientes
al organismo son los aparatos digestivo y urinario; los medios que el alma usa
para desechar lo negativo son los sueños.
La importancia de los sueños es evidente, y por lo tanto, el cristiano
debe discernir su origen. La guianza es del Espíritu y no del alma.
IV.
CONCLUSION
Entender el libro de Daniel producirá un
conocimiento que permitirá discernir los tiempos establecidos en la
Biblia. La vida de Daniel fue una vida
en pruebas. En la primera de ellas se puede estudiar los siguientes aspectos:
la definición; el origen de la contaminación; la plenitud de la prueba, su
fruto y recompensa; los tipos de ayuno; y los tipos de sueños.
Daniel arriesgó
su vida en muchas oportunidades y en cada una de ellas había una serie de
requisitos que este varón tuvo que llenar para salir victorioso de la
prueba. Los cristianos que consigan
interpretar sueños serán aquellos que a la manera de Daniel y de José, tengan
un corazón definido que les permita privarse de actitudes en su alma y de
acciones en su y en su cuerpo. El evangelio de Judas Iscariote reconocía a
Jesús como Maestro pero no como Señor indicando una falta de gobierno en su
vida. una persona que no está sujeta no podrá sujetar a la naturaleza.
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