LA VISION APOCALIPTICA DE DANIEL
(24 de enero
de 1993)
TEXTO BIBLICO
"Habló
Daniel y dijo: Veía yo en las visiones nocturnas, y he aquí que los cuatro
vientos del cielo agitaban el gran mar, y del mar subían cuatro grandes
bestias, muy diferentes las unas de las otras. "Daniel 7:2 (Traducida
del Arameo al Español)
INTRODUCCION
A diferencia de la enseñanza
devocional, que confronta al cristiano en una especie de espejo espiritual y le
muestra la forma que su rostro interno va alcanzando; la enseñanza escatológica
le revela al cristiano los tiempos en que se deben cumplir las diferentes
sentencias de Dios.
Este conocimiento tiene como
finalidad confirmar en el corazón del cristiano la esperanza de la venida del
Señor Jesucristo (Hechos 10:11) y dar fuerzas al cansado, tal y como lo
indicara el Apóstol Pablo a la Iglesia de Tesalónica: "Por tanto,
aliéntense los unos a los otros con estas palabras." (1a Tesalonicenses
4:18)
El Señor Jesucristo resalta la
importancia del conocimiento escatológico cuando dijo: " (...) porque sé
de donde vine y adónde voy (...)" (Juan 8:14); indicando la pre-existencia
y la escatología.
DESARROLLO
Como dicho en capítulos anteriores,
los libros de Daniel y Apocalipsis presentan una intensa correlación de
verdades; tanto de realidades prácticas para el equilibrio del cristiano, como
de eventos futuros. En este sentido, algunas explicaciones e interpretaciones
para las visiones del Profeta Daniel las proporciona el Apostol Juán en el
Apocalipsis.
Los cuatro vientos de la visión de
Daniel son cuatro ángeles que el Apóstol Juán relata en varias oportunidades:
"Después
de estas cosas vi a cuatro ángeles en pie, sobre los cuatro ángulos de la
Tierra, que detenían los cuatro vientos de la Tierra, para que el viento no
soplara soble la tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol."
(Apocalipsis 7:1)
Y también:
"El
sexto ángel tocó su trompeta, y oí una voz que salía de los cuernos del altar
de oro que está delante de Dios, que decía al sexto ángel que tenía la
trompeta: Desata a los cuatro ángeles que están atados junto al gran río Éufrates."
(Apocalipsis 9:13 y 14)
a) Las cuatro bestias: una primera
interpretación
La interpretación histórico-literal
de las cuatro bestias fué dada por Dios al propio Profeta Daniel, y es la
siguiente: "Las cuatro grandes bestias que has visto son cuatro reinos que
se levantarán en la Tierra." (Daniel 7:17)
Estos cuatro reinos ya se levantaron
y se constituyeron en imperios mundiales. La primera bestia, el león alado,
correspondió a Babilonia en manos de Nabucodonosor. La segunda bestia, el oso,
correspondió a Media y Persia. La tercera bestia, el leopardo alado,
correspondió a Grecia en manos de Alejando Magno (también llamado Alejandro el
Grande). La última bestia correspondió a Roma.
ATENCION:
La tercera bestia, el leopardo alado, tenía cuatro cabezas (Daniel 7:6). A la
muerte de Alejandro Magno, el imperio griego fué dividido entre sus cuatro
generales.
b) El cuarto imperio mundial: resurgimiento
Como indicado anteriormente, los
cuatro imperios mundiales ya tuvieron su cumplimiento histórico-literal pero, a
diferencia de los tres primeros, el cuarto tendrá todavía una aparición en los
últimos tiempos. Esto será a manera de antítesis de lo que lo que la Biblia
indica de la venida del Señor Jesucristo: "Un retoño brotará del tronco de
Isaí, y un brote de sus raíces traerá fruto." (Isaías 11:1)
ATENCION:
algunas versiones dicen: Saldrá una vara del tronco cortado de Isaí, o sea, el
Señor Jesucristo aparece cuando la humanidad ya había desechado a la familia de
Isaí (padre de David y linaje de Jesús), cuando la humanidad consideraba que no
se cumpliría la promesa de la Redención.
La humanidad considera como un hecho
del pasado al imperio mundial romano de hace dos mil años, sin embargo y por lo
que fué revelado a Daniel, este imperio ha quedado con sus raíces en la tierra:
"(...) Derriben ese árbol y destrúyanlo, pero dejen el tronco y sus raíces
en la tierra, que sea atado con cinchos de hierro y de bronce entre la hierba
tierna del campo (...)" (Daniel 4:23)
Este imperio está esperando el
cumplimiento de los tiempos para realizar su espantoso resurgimiento:
"Seguí mirando en las visiones
nocturnas, y he aquí la cuarta bestia, espantosa, fuerte y muy poderosa, que
tenía grandes dientes de hierro; devoraba, despedazaba y hollaba los restos con
sus pies. Era diferente de todas las bestias que estaban ante ella, y tenía
diez cuernos. Estaba expectante acerca de los cuernos, cuando ascendió entre ellos
un cuerno pequeño, y en presencia de éste, tres cuernos fueron arrancados; y he
aquí, el cuerno tenía ojos como de hombre, y con su boca hablaba grandes
cosas." (Daniel 7:7 y 8)
En el tronco del imperio romano
surgirán diez cuernos. La primera interpretación para estos diez cuernos son
diez naciones. Sin embargo y a la luz del significado bíblico de la
numerología, donde diez tipifica la plenitud o la totalidad, una mejor
interpretación son diez congregaciones de
naciones o la plenitud de las naciones.
Para manifestarse, el Antricristo
derrotará tres poderosos reinos en la Tierra: "(...) ascendió entre ellos
un cuerno pequeño, y en presencia de éste, tres cuernos fueron arrancados
(...)" (Daniel 7:8)
ATENCION:
el imperio ruso dejó de existir a principios de la década de los '90.
c) Los ángeles del gran río Éufrates:
"El sexto ángel tocó su
trompeta, y oí una voz que salía de los cuernos del altar de oro que está
delante de Dios, que decía al sexto ángel que tenía la trompeta: Desata a los
cuatro ángeles que están atados junto al gran río Éufrates. Fueron, pues,
desatados los cuatro ángeles que estaban preparados para la hora, día, mes y
año, a fin de matar a la tercera parte de los hombres." (Apocalipsis 9:13
a 15)
El río Éufrates atraviesa todo Irak y
desemboca en el Golfo Pérsico. Durante la guerra que hubo en esta región
(Guerra del Golfo Pérsico, en 1991), se produjeron tremendos desastres
ambientales como: pozos de petróleo fueron incendiados, el mar fué contaminado
con toneladas de crudo, etc. Esto ha
aumentado de manera irreversible el
efecto invernadero del planeta y el deshielo de los polos perjudicaron
directamente el sistema ecológico mundial. De alguna manera a estos cuatro
ángeles se les permite cierto accionar o, tal vez, ya comenzaron a ser
desatados para realizar aquello para lo que estaban preparados.
d) Los ciento cuarenta y cuatro mil sellados:
"Después de estas cosas vi a
cuatro ángeles en pie, sobre los cuatro ángulos de la Tierra, que detenían los
cuatro vientos de la Tierra, para que el viento no soplara sobre la tierra, ni
sobre el mar, ni sobre ningún árbol (...) Entonces oí el número de los que
fueron sellados: ciento cuarenta y cuatro mil sellados de todas las tribus de
los hijos de Israel." (Apocalipsis 7:1 y 4) Este ciento cuarenta y cuatro
mil sellados es un número simbólico que representa doce por doce, o sea, la
plenitud del gobierno de Dios en la vida del cristiano.
El cristiano que esté plenamente
gobernado por Dios será levantado de esta Tierra, a la manera de Enoc (Génesis
5:24) y Elías (2o Reyes 2:11)
e) El
trono de los santos del Altísimo:
"Entonces miré, y he aquí,
tronos fueron puestos, y el Anciano de días se sentó. Su vestidura era blanca
como la nieve, y el pelo de su cabeza era como lana pura, su trono, llama de
fuego, y sus ruedas, fuego ardiente." (Daniel 7:9)
Antes de la destrucción de la bestia,
fueron preparados veinticuatro tronos para juzgar (Apocalipsis 20). Esos tronos
son para los cristianos que alcancen la estatura espiritual que Dios desea. Por
lo tanto, cuando se manifieste la bestia espantosa, los santos del Altísimo no
estarán en la Tierra.
Sin embargo, es importante entender
que, aquellos santos del Altísimo que se queden, lo harán con un cuerpo
transformado para ayudar al remanente y dar consuelo en medio de la Gran
Tribulación, protegiendo a la "mujer que huye en el desierto"
(Apocalipsis 12:6) Esto en un galardón para los huios.
f) Las cuatro bestias: una segunda
interpretación
La interpretación escatológica dada
por el Espíritu Santo indica que el Anticristo está representado por cuatro
bestias diferentes, a manera de cuatro doctrinas o cuatro personalidades
formando una sola. Es interesante
observar que el Señor Jesucristo se le presenta al Profeta Ezequiel con cuatro
rostros: de hombre, de león, de buey y de águila. (Ezequiel 1:10) Esto es
confirmado en los cuatro evangelios que describen las cuatro facetas del Señor
Jesucristo: como Rey (Mateo), como Siervo (Marcos), como Hombre (Lucas) y como
Dios (Juan).
EVANGELIO
FACETA ROSTRO
Mateo Rey León
Marcos Siervo Buey
Lucas Hombre Hombre
Juán Dios Aguila
El Señor Jesucristo es reconocido en
su naturaleza cuadridimensional, de la misma forma que Dios lo es, o sea, Dios
tiene cuatro aspectos o facetas: El Dios Altísimo, la esencia de Dios,
El-Elión, " (...) No podrás ver mi rostro, porque nadie puede verme y
vivir" (Exodo 33:20), "Nadie ha visto jamás a Dios" (Juán 1:18)
y " (...) a quien ninguno de los hombres ha visto ni puede ver" (1a
Timoteo 6:16); que se derivó en la triunidad, o sea, el Dios Padre (Juán 14:7), el Dios Hijo (Juán
3:16) y el Dios Espíritu Santo (Juán 14:26)
El Anticristo que está descrito en
las cuatro bestias tiene que presentarse con cuatro facetas, cuatro caras de
bestias: la primera un león alado, la segunda un oso, la tercera un leopardo
alado con cuatro cabezas y la cuarta espantosa sin describir.
Cada una de estas bestias tiene su
propia unción y el Anticristo utilizará las cuatro unciones para manifestarse.
CONCLUSION
La visión de Daniel de las cuatro
bestias tiene, por lo menos, dos interpretaciones. En primer lugar la
histórica, que ya tuvo su cumplimiento con los imperios Babilónico, Medo-Persa,
Griego y Romano. En segundo lugar la
escatológica, que no ha tenido su cumplimiento, de conformidad con las palabras
del Señor Jesucristo (Mateo 24:15)
Los cuatro vientos de la visión de
Daniel son cuatro ángeles que
actualmente están detenidos impidiendo la manifestación del Anticristo. El imperio romano, último de los cuatro
imperios tipificados por las bestias, resurgirá y en su seno reunirá la
plenitud de las naciones que proclamarán al Anticristo como su líder mundial. El cristiano que esté plenamente gobernado
por Dios será levantado de esta Tierra y sentado en tronos para juzgar. El Señor Jesucristo es la plenitud de la
Divinidad y el representante de Dios en la Tierra, necesariamente tenía que ser
cuadridimensional y tener cuatro aspectos. Como imitación, la cuadridimensión
de las tinieblas utilizará las facetas de las bestias para manifestar al
Anticristo.
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