sábado, 11 de agosto de 2018

LA RESURRECCIÓN Y SUS ETAPAS.



1Co 15:13  Porque si no hay resurrección de muertos, tampoco Cristo resucitó. 

La resurrección o vuelta a la vida de un muerto, no es una doctrina nueva, sino más bien una muy antigua esperanza que guardaban en sus corazones todas aquellas personas que ejercían fe en Jehová y sus promesas, para todos los que cumplan sus mandamientos. Vemos en Ex. 13:19 " Tomó también consigo Moisés los huesos de José, el cual había juramentado a los hijos de Israel, diciendo:
Dios ciertamente os visitará, y haréis subir mis huesos de aquí con vosotros", aquí vemos que José sabía que había una esperanza en volver a vivir, y que a su tiempo Dios (Jesucristo) nos visitaría, y él deseaba despertar en tierra de Canaán (tierra de matrimonio) e hizo jurar a los Israelitas que llevarían sus huesos de Egipto. También leemos en Oseas 6:2 " Nos dará vida después de dos días; en el tercer día nos resucitará,  y viviremos delante de él".
De este modo la doctrina de la resurrección no era desconocida para las personas que vivieron en la dispensación del Antiguo Testamento, y era ampliamente conocida por los contemporáneos de Jesús, al grado que habían unos que creían en la resurrección (Juan 11:24) y otros que no creían (Mateo22:23). ¿Pero que fue lo que enseñó Jesús sobre este tema?  ¿Qué es lo que la Santa Palabra de Dios, la Biblia nos enseña? veamos lo que Jesús dijo:

Jn. 5:24  De cierto, de cierto os digo: El que oye mi palabra, y cree al que me envió, tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida. 

Jn. 5:25  De cierto, de cierto os digo: Viene la hora, y ahora es, cuando los muertos oirán la voz del Hijo de Dios; y los que la oyeren vivirán. 

Jn. 5:26  Porque como el Padre tiene vida en sí mismo, así también ha dado al Hijo el tener vida en sí mismo; 

Jn. 5:27  y también le dio autoridad de hacer juicio, por cuanto es el Hijo del Hombre. 

Jn. 5:28  No os maravilléis de esto; porque vendrá hora cuando todos los que están en los sepulcros oirán su voz; 

Jn. 5:29  y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; más los que hicieron lo malo, a resurrección de condenación.  

En el versículo Juan 5: 25 dice que los muertos oirán la voz del Hijo de Dios (Jesucristo) y los que la oyeren vivirán, no todos los muertos la oirán, sino solo aquellos que aceptaron al buen pastor (Jesucristo) como su único y suficiente Salvador (Jn. 10:14  Yo soy el buen pastor; y conozco mis ovejas, y las mías me conocen), y en Juan 5:24 dice que el que oye la palabra de Jesús y cree al que le envió, tiene vida eterna;  y no vendrá (resucitará a condenación, más ha pasado de muerte a vida; o sea que las personas que siguen y se mantienen en la santidad del Cordero de Dios resucitarán al escuchar su voz y no resucitarán para ser condenados, sino para vivir. Pero en el verso de Juan 5:28 y 29 dice que vendrá la hora que "TODOS" los que están en los sepulcros (muertos) oirán su voz (la del Padre) y los que hicieron lo bueno, saldrán a resurrección de vida; más lo que hicieron lo malo, a resurrección de condenación. Se nota claramente aquí que hay dos resurrecciones distintas, a decir

1°- La resurrección de los que sí oyen la voz del Hijo de Dios, y vienen a vivir.

2°- La resurrección de "TODOS" los muertos, que escuchan la voz del llamado del Padre, entre los cuales habrán personas buenas y malas en general, que serán juzgados según sus actos. Es de tomar en cuenta que Dios tiene un perfecto orden para la resurrección según lo vemos en 1Co 15:22  Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados. 

1Co 15:23  Pero cada uno en su debido orden: Cristo, las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida.  Jesucristo es el primero que resucitó en la gloria del Padre (Rom.6:4), después de "EL" las primicias (Bikurim) de los frutos de resurrección, y después los que son de Cristo.
Miremos a continuación ésta primera resurrección, que abarca a las personas que caminaron con Dios y que obedecieron sus leyes. Dice la Biblia respecto a esta resurrección Ap. 20:6  Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad sobre éstos, sino que serán sacerdotes de Dios y de Cristo, y reinarán con él mil años.  Ésta primera resurrección está compuesta de tres etapas :

ETAPA A: Los bikurim o los primeros frutos: estos son aquellos santos vencedores que caminaron con Dios desde Adán hasta la resurrección de Jesús, abarcando toda la dispensación del Antiguo Testamento y a los contemporáneos de Jesús que murieron antes que el resucitara (como Juan el bautista) los encontramos en Mat 27:51  Y he aquí, el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo; y la tierra tembló, y las rocas se partieron; 

Mat 27:52  y se abrieron los sepulcros, y muchos cuerpos de santos que habían dormido, se levantaron; 

Mat 27:53  y saliendo de los sepulcros, después de la resurrección de él, vinieron a la santa ciudad, y aparecieron a muchos.  Vemos claramente como dice que salieron de los sepulcros después que Jesús resucitó.

ETAPA B: Los que son de Cristo, o sea todos aquellos que han seguido las enseñanzas de Cristo y que cumplen sus leyes. Esto comprende a todos los seguidores de Cristo como sus apóstoles, sus madre, sus discípulos, los Cristianos que han muerto desde entonces, nosotros los Cristianos contemporáneos, y todos los que muramos hasta antes del Rapto.  Lo encontramos esto en 1Tes. 4:16  Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero. 

1Th 4:17  Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor. 

ETAPA C: Los Cristianos que mueren durante la Gran Tribulación. La Biblia nos enseña que habrá muchos Cristianos que al no ser vencedores en Cristo se perderán el Rapto, y se quedarán a atravesar el período de La Gran Tribulación, tendrán la oportunidad de volverse de su mal camino y confirmar su fe en Cristo, rechazando los ofrecimientos del Anticristo y parándose sobre la Doctrina de La Roca. Estas personas que atraviesen esto serán degollados por el Anticristo, pero por su perseverancia recibirán el premio de la vida y reinarán con Cristo, lo encontramos en Ap. 20:4 " Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar; y vi las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años". Si este versículo dice que no adoraron a la Bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos, esto los ubica claramente en el período de la Gran Tribulación,(no se fueron en el Rapto) pero son levantados (resucitados) antes que comience el gobierno milenial de Cristo, para que reinen con él por mil años.

Respecto a la primera resurrección (formada por sus tres etapas) nos dice la Biblia Ap. 20:6  Bienaventurado y santo el que tiene parte en la primera resurrección; la segunda muerte no tiene potestad sobre éstos. En otras palabras es bienaventurado el que resucita al escuchar la voz del Hijo de Dios, pues sus pecados le han sido perdonados, por la expiación de la Sangre de Cristo tal como nos lo enseña la Biblia en  

Rom. 3:21  Pero ahora, aparte de la ley, se ha manifestado la justicia de Dios, testificada por la ley y por los profetas; 

Rom 3:22  la justicia de Dios por medio de la fe en Jesucristo, para todos los que creen en él. Porque no hay diferencia, 

Rom 3:23  por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios, 

Rom 3:24  siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús, 

Rom 3:25  a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados, 

Ahora veamos la segunda resurrección. Ésta es la que sucederá después del Gobierno milenial de Jesucristo y sus vencedores.  

Rev 20:11  Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él, de delante del cual huyeron la tierra y el cielo, y ningún lugar se encontró para ellos. 

Ap. 20:12  Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras.

Ap. 20:13  Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras. 

En estos versículos aprendemos que los muertos grandes y pequeños se presentan delante de Dios, y vemos como Dios es tan Justo, que son abiertos los libros de la vida para juzgar a todos según sus obras; nadie podrá poner excusas ni pretextos respecto a sus actos, pues todo está en esos libros. Aquí también seguramente, habrán personas que  tenían y practicaban una fe que no tomaba a Jesucristo como eje principal de la salvación, por ejemplo los Testigos de Jehová, los Católicos, Musulmanes, Budistas, Krisnas, aún Judíos, y muchos que siendo sinceros en su fe, murieron sinceramente equivocados, pues para Dios las cosas SON O NO SON, pues dice en su Palabra claramente 1Jn 5:12 " El que tiene al Hijo, tiene la vida; el que no tiene al Hijo de Dios no tiene la vida". No podemos pretender tener la vida si no tenemos a Cristo cubriéndonos con su Sangre, por ésta causa los que mueren sin Cristo no pueden escuchar su voz  llamándolos a resurrección, y les tocará resucitar al llamado del Padre, para presentarse delante del Gran Trono Blanco, para allí ser juzgados según sus hechos. Lógico es pensar que habrá personas que se salven, como también habrá millones que serán echados al lago de fuego, la segunda muerte Ap. 21:8  Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda. 

Hermanos Cristianos, tenemos un camino a vida eterna, una fuente de luz  que nos guía, Jn. 3:18  El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios

Jn. 14:6  Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.

Alabemos al Santo Nombre de Jesucristo, y seamos obedientes a sus leyes, calafatiemonos con su Bendita y Santa Sangre, para que nuestros pecados sean lanzados al mar del olvido, en las espaldas del Padre (éste es otro fascinante tema), así seremos más que sus siervos Jn. 15:14  Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando.  Jn. 15:15  Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer

Perseveremos en la fe De Jesucristo, alabando, agradeciendo, exaltando y honrando su Santísimo Nombre. ALELUYA, ALELUYA POR SIEMPRE.


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